Regresar a la palabra es recordar el evangelio

La espiritualidad cristiana implica una decisión personal para “conocer y crecer” en nuestra relación cotidiana con el Señor Jesucristo, sometiéndonos a la palabra de vida y esperanza que proviene de Dios. No se genera por sí misma, es fruto de la nueva vida que Dios crea en nosotros a través de la enseñanza. En otras palabras, la espiritualidad cristiana hace referencia a la vida que responde al «evangelio», que significa «buena noticia» o «buenas nuevas».

El apóstol Pablo escribió: «Por tanto, de la manera que recibieron a Cristo Jesús el Señor, así anden en Él» (Col 2:6). A través del evangelio recibimos a Cristo por la fe y por medio del evangelio andamos en Cristo por la fe.

El mismo Jesús es la buena noticia. En una frase, podemos describir la buena noticia: la persona y la obra de Jesucristo. Volver a la palabra es la mejor manera de recordar este mensaje. Por eso podemos decir con toda certeza que la vida cristiana es una vida centrada en la enseñanza de Dios. Nos acercamos a Dios inicialmente mediante la fe en quién es Jesús y en lo que ha hecho por nosotros.

Necesitamos escuchar el evangelio (buenas noticias) todos los días porque todos los días lo olvidamos.” Martín Lutero

Practicar el amor profundo de Dios es una elección consciente, personal e intransferible. Nadie puede hacerlo por nosotros. Se trata de establecer una conexión afectiva con Dios a través de Jesucristo.